Cinco académicas y un académico asumen cargos directivos en la facultad

Este año trajo una serie de cambios al interior de la facultad, debido a que se cuenta con un nuevo decano, el doctor Mario Aranda, y a la creación de subdirecciones en la Escuela de Química y la Escuela de Química y Farmacia.

Tras ser director de investigación y postgrado y contando con una vasta y reconocida trayectoria dentro y fuera de la UC, el profesor Aranda asumió como máxima autoridad de la facultad en mayo de este año y por los próximos cuatro años.

Con la llegada del decano Aranda, tres direcciones de la facultad recibieron a nuevas autoridades, las cuales estarán encargadas de dirigir y guiar los caminos al interior de éstas y los de la facultad en tres áreas: gestión académica de pregrado, investigación, postgrado, vinculación con el medio y educación continua.
 

Dirección de Gestión Académica (DGA)

En la DGA, la doctora Verónica Armstrong de la Escuela de Química retomó su cargo, después de ocho años (2012-2019) de desempeñarse como directora.

“Sin duda, es un honor y a su vez una gran responsabilidad volver a tener un cargo de esta importancia en mi facultad. En esta experiencia, espero hacer mi máximo esfuerzo y aportar para seguir avanzando hacia la excelencia en el área que me corresponde liderar, contribuir a los distintos quehaceres de la facultad y continuar cumpliendo con las metas del plan estratégico, cuidando siempre el clima laboral y a las personas”, señala la profesora.

Para abordar este desafío, la académica indica que “el dialogo con los equipos administrativos y profesionales, representantes estudiantiles, las direcciones de escuelas, el consejo de facultad y el decano, será imprescindible en mi gestión”.
 

Dirección de Investigación y Postgrado (DIPOG)

Después de ser subdirectora de postgrado desde el año 2019, la doctora Margarita Aliaga de la Escuela de Química asumió el liderazgo de la DIPOG.

Para la académica, su nuevo cargo “involucra un enorme desafío y una gran responsabilidad en torno a algunos de los pilares fundamentales de la actividad académica, como son la investigación y el postgrado, por lo que espero continuar la senda de crecimiento que hemos tenido hasta la fecha, entregando mi mayor compromiso a la dirección y a la facultad”.

Respecto a sus metas en investigación, la profesora espera “continuar con la implementación de la unidad de gestión de proyectos de investigación, lo que permitirá mejorar y normalizar instrumentos de apoyo para todo tipo de investigación, ampliar la búsqueda de socios estratégicos en la industria y apoyar la presentación de propuestas con fondos de mayor envergadura en organismos nacionales e internacionales”.

Por otra parte, en postgrado le gustaría “mantener un proceso de mejoramiento continuo y de internacionalización para la actual formación doctoral, fomentar la participación de ambas escuelas en actividades académicas y programas interdisciplinares y trabajar en la formulación de nuevos programas de postgrado”.

Con respecto a otro cambio que ocurrió en la DIPOG, la doctora Angélica Fierro de la Escuela de Química se convirtió en la nueva subdirectora de postgrado, tras desempeñarse como jefa del departamento de Química Orgánica.

Sobre este nuevo desafío, la académica espera “pavimentar la ruta para llegar a generar una mayor oferta de postgrados y tener más participación e integración con aquellos doctorados inter-facultades, como el Doctorado en Neurociencias y el Doctorado en Ingeniería y Ciencias con la Industria (DICI), entre otros”.

Además, considerando los requerimientos en el corto, mediano y largo plazo, la profesora agrega que “será necesario implementar acciones para formar a las y los nuevos doctores con capacidades en investigación y aplicación de estas últimas, continuando con el fortalecimiento en el proceso de internacionalización de nuestras y nuestros investigadores jóvenes”.

Finalmente, en el marco de los 50 años que cumple el programa de Doctorado en Química este año, la doctora Fierro indica que “es relevante destacar que las gestión anterior dejó una subdirección ordenada y que tenemos un equipo que trabaja de manera coordinada y conjunta, claustros de excelencia y estudiantes con interés y motivación, por lo que se espera que el trabajo colaborativo nos lleve a lograr nuestros desafíos”, indica la doctora Fierro.
 

Dirección de Extensión y Educación Continua (DEEC)

Por su parte, el doctor Ricardo Salazar de la Escuela de Química asumió como nuevo director de la DEEC, lo cual “significa una gran responsabilidad, por lo que espero sumarme y liderar este equipo, potenciar las actividades de vinculación con el medio y dar a conocer aún más el trabajo que se desarrolla en la facultad a través de las comunicaciones. Además, me enfocaré en fortalecer los diplomados y cursos que ya existen, junto con el diseño y desarrollo de nuevos programas de educación continua”, afirma el profesor.

Sobre los retos que conlleva el cargo, el académico indica que estos serían “incrementar la oferta de alto interés en cursos y diplomados, que involucre todas las áreas de la química y las ciencias farmacéuticas, conservando la calidad y relevancia de los programas que ya existen. Además, me gustaría buscar y mantener relaciones sólidas con empresas, organizaciones y profesionales para identificar las necesidades de formación y desarrollar programas relevantes y de calidad. Por otra parte, con nuestra gestión me esforzaré en que todas y todos contribuyamos aún más y, de manera fluida, al crecimiento y reputación de la facultad”.
 

Subdirecciones de las escuelas

Después de la creación de la Escuela de Química y la Escuela de Química y Farmacia en el año 2021, se instauró recientemente una subdirección para cada escuela.

En la Escuela de Química, la doctora Flavia Zacconi se convirtió en subdirectora, “una oportunidad que agradezco profundamente, especialmente a la entonces directora, doctora Mónica Antilén, por confiar en el trabajo que llevo desarrollando desde mi llegada a la facultad. Esta nueva responsabilidad y compromiso coincide, en mi vida académica-profesional, con una nueva etapa de desarrollo, donde me permite hacer uso de toda la experiencia adquirida en diversos ámbitos, aportando y colaborando con nuestra escuela y facultad, y utilizando una mirada global, de equidad, interdisciplinaria y con proyección a futuro”, señala la profesora.

Como parte de los desafíos que visualiza en su cargo, la académica indica que, “desde la gestión que me corresponde, estaremos desarrollando nuevos modelos de prácticas profesionales, generando un proceso de transición entre el plan de estudios actual y el rediseño, potenciando la relación de nuestras y nuestros estudiantes con las industrias. Asimismo, nuestro continuo reto es lograr una mejora permanente en el desempeño y competencias de nuestras y nuestros estudiantes, aportando a su desarrollo científico-profesional, en colaboración constante con las y los académicos de la facultad”.

Por su parte, en la Escuela de Química y Farmacia, la doctora Rosemarie Mellado asumió como subdirectora, lo cual es “un gran honor para mí poder estar aportando en seguir formando las y los mejores profesionales Químicos Farmacéuticos que requiere la sociedad actual”.

En términos de sus retos y su función, la profesora afirmó que “el cargo de subdirección está muy ligado a velar y facilitar que nuestras y nuestros estudiantes puedan concluir sus actividades terminales de tesis o profundizaciones profesionales exitosamente. Además, es crucial activar, desarrollar y crear convenios con institucionales de diferentes áreas para que reciban o continúen recibiendo a nuestras y nuestros estudiantes”.

Para finalizar, las seis nuevas autoridades destacaron que, en conjunto con el nuevo decano, las y los académicos, colaboradores y estudiantes, esperan alcanzar los objetivos propuestos y, hacer de la facultad, un espacio de armonía y de excelencia, tal como ha sido hasta ahora.